Descubre la Magia de Florencia en Caldas
Florencia, el corregimiento más grande del territorio samaneño, despliega su esplendor en el corazón de Caldas. Con 45 veredas que conforman su extenso territorio, este rincón ancestral cautiva con su riqueza natural y su arraigada historia. Desde su creación como San Narciso hasta su renacimiento como Florencia, este lugar ha sido testigo de importantes acontecimientos que han marcado su identidad.
Antaño conocido como San Narciso, Florencia floreció gracias al descubrimiento de minas de oro y termales por el sacerdote Florencio Sánchez. Con la apertura de la carretera hacia Samaná en 1990, este corregimiento se conectó aún más con el mundo exterior. Las festividades anuales, como las Fiestas del Civismo y la Feria Ganadera, reflejan el espíritu comunitario y la tradición de sus habitantes. El Templo Nuestra Señora de la Asunción, imponente en la plaza principal, es un símbolo de fe y devoción que enriquece el patrimonio religioso de la región.
Enmarcado por la majestuosidad de la reserva natural más grande de Caldas, el Parque Nacional Natural Selva de Florencia, este corregimiento invita a sumergirse en la exuberante biodiversidad de sus bosques y la pureza de sus aguas. El Charco de San Lucas, un tesoro escondido dentro del parque, ofrece un oasis de serenidad y belleza natural. Además, la arquitectura religiosa, como el Templo Nuestra Señora de la Asunción, es un testimonio vivo del legado cultural de Florencia.